Muchas veces cuando instalamos canceles de cristal templado nuestros clientes nos preguntan sobre los cuidados básicos que deben tener para mantener sus canceles en óptimas condiciones y como recién instalados. Los cuidados para canceles son sencillos y por ello decidimos crear esta breve guía.

Un cancel de cristal templado puede dotar a tu baño de elegancia y modernidad. Además de ayudarte a crear una ilusión de estar en un espacio mucho más amplio.

Pero ¿Cómo y cuándo limpiarlo? La respuesta es sencilla: Límpialo con la misma frecuencia en que se limpia tu baño, quizás una o dos veces por semana. Con un paño húmedo limpia el cancel buscando eliminar los residuos de jabón y agua que quedan sobre el cristal. Algunas personas usan una esponja con un poco de shampoo o algún jabón especial para enjabonar el cristal y después limpian con agua y secan con papel periódico o una talla. Algunas veces para dotar de más claridad al cristal usan productos como windex como paso final.

Está de más decir que el uso de materiales corrosivos o abrasivos como fibras o algunos jabones como el jabón en polvo o químicos que a veces usamos para limpiar el baño pueden resultar muy dañinos para los cristales. Esto puede resultar en cristales opacos, manchado o rayados.

En cuanto a mantenimiento, la mayoría de canceles necesitan muy poco. Los materiales inoxidables usados por Canceles Finos, dotan de una durabilidad muy alta a todo lo fabricado con ellos. Aún así, colocar unas gotas de aceite en los herrajes de movimiento ayudarán a evitar cualquier rechinido y mal funcionamiento.

Todos los canceles de cristal templado realizados en Canceles Finos se realizan con materiales de la más alta calidad. Nos preocupamos por los detalles y porque cada pieza dure un extenso tiempo y sea de la máxima utilidad para nuestros clientes. De esta manera puedes estar seguro que cada uno de nuestros canceles estará contigo toda la vida.